Fuente de los compadres

El tramo fluvial comprendido entre los puentes del Ferrocarril y de la Autovía se caracteriza por la presencia de dos islas fluviales no accesibles que constituyen un excelente refugio para numerosas especies de aves y otros animales.

Destaca la notable colonia de cigüeña blanca, la cual supera las 20 parejas reproductoras y la presencia todas las temporadas de varias parejas de milano negro que anidan también en el excelente bosque de ribera que cubre las islas. Aún más espectacular es el dormidero de garcilla bueyera que se forma todas las noches en una pequeña isleta del entorno y que llega a agrupar a más de medio millar de aves. Del mismo modo, el cormorán grande constituye en una de las islas un dormidero invernal de uso habitual.

Otros miembros de la familia de las ardeidas como el avetorillo, que anida en los carrizales de las orillas, martinete, la garceta común, la garza real e incluso la garceta grande, son observados aquí de modo habitual.

En los meses fríos resulta frecuente descubrir a algún halcón peregrino acechando a las abundantes palomas torcaces, mientras que el esmerejón y el gavilán persiguen a los gorriones y otras pequeñas aves que constituyen sus presas.

La zuda o presa de las aceñas de Pinilla es utilizada habitualmente por muchas aves para descansar, beber o alimentarse, entre ellas el ánade azulón, el andarríos chico, y la gallineta así como los ya mencionados cormoranes, garzas y cigüeñas.

Algunas de las especies más frecuentes e interesantes:

Estivales

milano negro, autillo europeo, torcecuello euroasiático, oropéndola europea, carricero tordal, carricero común y ruiseñor común.