Un refugio para las abejas solitarias

Todos estos insectos son polinizadores imprescindibles para las flores de nuestros campos, pero también para los cultivos.

En el interior de nuestro Refugio de las abejas, las hembras de las abejas solitarias de diversas especies seleccionan una caña hueca, la limpian y en su interior comienzan a depositar una bolita de polen y néctar de casi un centímetro de diámetro, Después colocan el huevo y cierran con arena, barro u hojas la cámara, Así, poco a poco, irán rellenando cada caña con provisiones y larvas que nacerán durante la siguiente primavera o verano.

Dentro de las abejas solitarias, el 70% no tienen aguijón (son machos) y las hembras, a diferencia de la abeja de la miel, no pican, salvo que las agarremos en nuestra mano y las apretemos con fuerza.

Salvemos a nuestros polinizadores: abejas solitarias, abejorros y mariposas; ellos cuidan de nosotros.

 

Cañas ocupadas por abejas solitarias del género Osmia, polinizadores de numerosos frutales y cultivos.

Cañas ocupadas por abejas solitarias del género Osmia, polinizadores de numerosos frutales y cultivos.

Una caña abierta al medio para que podamos ver las celdas o cámaras con el depósito de polen y néctar.

Ruta Biodiversa Zamora